Marcos de puertas y ventanas de arenisca
Ventajas de la piedra natural en la construcción de viviendas
Durante el proceso de construcción hay que tomar muchas decisiones importantes, como la elección de los marcos de puertas y ventanas. Esos pequeños detalles, como la elección de los antepechos de las ventanas o los peldaños de las escaleras, influyen notablemente en el aspecto general de una casa.
Nuestra arenisca impresiona por su colorido natural y es perfecta para interiores y exteriores. Gracias a su superficie de alta calidad y a su adaptabilidad, confiere a cada proyecto un ambiente único. Póngase en contacto con nosotros para obtener dimensiones personalizadas, plazos de entrega y más detalles sobre nuestros productos.
Duraderos marcos de puertas y ventanas de arenisca
La arenisca es un material de construcción de eficacia probada que se caracteriza por su durabilidad y calidad. Sus propiedades la hacen especialmente adecuada para su uso en marcos de ventanas y puertas:
Resistencia a la intemperie: la arenisca puede soportar condiciones extremas como ciclos de congelación-descongelación, calor y lluvia.
Resistencia a las influencias ambientales: El material no reacciona a la lluvia ácida ni a otras influencias ambientales duras, lo que protege permanentemente su calidad y composición.
Amplia gama de aplicaciones: Esta durabilidad hace que la arenisca sea ideal para marcos de ventanas, alféizares y otras zonas exteriores.
Aspecto atractivo: La textura rústica confiere a cualquier hogar un aspecto natural y atractivo.
Procesamiento sencillo: la arenisca es fácil de procesar y, por tanto, satisface casi todos los deseos del propietario de un edificio.
Gracias a sus versátiles propiedades, la arenisca es una opción sostenible y estéticamente agradable para el diseño de ventanas y puertas.
Marco de puerta y alféizar de ventana de arenisca
La pieza central del aspecto de toda buena instalación de puertas y ventanas es un marco estable y cuidado.
Confiere al edificio un carácter muy personal y puede adaptarse a cualquier estilo.
¿Ha pensado alguna vez en dar a los marcos de sus puertas y ventanas un aspecto muy individual? Una puerta de entrada, por ejemplo, puede realzarse con un marco de arenisca con dintel o jambas para crear un portal sólido. Un dintel no sólo es una ventaja absoluta por razones estructurales, sino que también puede transformar su casa en un verdadero punto de atracción. Un dintel de arenisca puede instalarse en estilo moderno, clásico o barroco. No hay límites para sus deseos e ideas.
Personalice su marco de arenisca con una clave, por ejemplo, con un escudo, el año o sus iniciales.
Si necesita ayuda con el diseño de su vivienda póngase en contacto con nosotros. Estaremos encantados de ayudarle a amueblar su casa con elementos y mobiliario de gran belleza.
Preguntas frecuentes sobre los marcos de ventana de arenisca
Para las repisas de ventana de piedra natural se suele recomendar un adhesivo especial para piedra natural que no contenga disolventes y sea elástico, a fin de evitar la decoloración y las grietas por tensión. Son especialmente adecuados los adhesivos de resina epoxi o los adhesivos de silicona autorizados para piedra natural. Es importante que el adhesivo sea de reticulación neutra para no provocar una reacción química con la piedra. Asegúrese de que el sustrato esté limpio, seco y estable antes de aplicar el adhesivo. Para una mayor estabilidad, se puede utilizar adhesivo para baldosas adicional o adhesivo de montaje, que también son adecuados para la piedra natural.
La arenisca es una piedra natural resistente a la intemperie, ideal para marcos y alféizares de ventanas exteriores. Su robusta estructura la hace resistente a las heladas, la humedad y las fluctuaciones de temperatura. Un alféizar de piedra arenisca bien elaborado, con una nariz de agua, también garantiza la evacuación del agua de lluvia y la protección de la fachada. De este modo, el color natural se conserva durante muchos años y confiere a su casa un ambiente elegante.
Por lo general, los alféizares de piedra arenisca deben impregnarse cada 3 ó 5 años, en función del desgaste y las condiciones climáticas de la zona exterior. La impregnación periódica protege la piedra arenisca de la humedad, la suciedad y las heladas sin alterar su color natural ni su transpirabilidad. Se recomienda renovar la impregnación cuando sea necesario, sobre todo si se observa que el agua ya no gotea bien.